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Montería de venados en La Osa Grande

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Esta finca situada en Retamal de Llerena en Badajoz. Nominada a algunos de los mejores premios de ámbito nacional en varias ocasiones es una de las monterías en abierto que no dejan indiferente a cualquiera.

Venados y jabalíes son los protagonistas año tras año de un día de caza en el que el entretenimiento suele estar asegurado. Poco menos de quinientas cincuenta hectáreas de monte componen la mancha a cazar, con tres manchones principales de jaras separados por dehesa de encinas, todo rodeado de siembras y con innumerables charcas, lo que hacen un verdadero vergel para las reses.


Con estas premisas Isaac Alvarez citaba a sus monteros en la mañana del pasado cinco de noviembre en la que en colaboración con la Peña Cinegética La Traviesa y Cinegética Morales tenían preparado todo un espectáculo montero.


Tras las últimas indicaciones y con total celeridad en un día que auguraba mucha lluvia, fueron partiendo las armadas hacia el cazadero.

Desde la colocación de los primeros cierres se pudieron escuchar los estruendos de los primeros lances, lo que indicaba que la mancha estaba muy buena de reses.

No tardaron en colocarse el resto de los cazadores y una vez todo estuvo listo, se dio la orden de abrir portones.

Un extraño silencio copó los primeros minutos, que fueron los que tardaron los canes en encontrar los primeros encames y empujar a los venados hacia las puertas que hacían fuego incesantemente.

A medida que las rehalas con su intenso esfuerzo y con un trabajo excelente fueron sacando la mancha, la caza fue entrando a las posturas que intermitentemente atronaban la sierra para indicar que todavía quedaba caza dentro.

Lentamente se fue apagando el fragor de la contienda y pasadas las dos de la tarde se retiraba a los monteros para dirigirlos al cortijo de la finca donde les esperaba un buen catering mientras muleros y cargueros se esforzaban por conformar el plantel.

Finalmente acudieron treinta y nueve venados, con varios de ellos de gran porte y ocho jabalíes entre los que destacaba un buen macareno. Otro magnífico e indiscutible día de caza junto a Monteros de Siempre.

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